Violencia de género y violencia doméstica en el mundo

No se nace mujer, se muere al serlo.

Es el eslogan mostrado por ciertas manifestantes para denunciar la violencia de género y violencia doméstica que viven las mujeres a través del mundo. Una modificación de la famosa frase de Simone de Beauvoir, “No se nace mujer, se llega a serlo”, para despertar las conciencias sobre un tema desconocido.

Las violencias hacia las muejeres en el mundo tienen muchas facetas: agresion fisica, acoso sexual, insultos verbales cuando no son asesinatos, violaciones, o amputaciones. Afectan a las mujeres de cualquier edad, de cualquier lugar, de cualquier sociedad. Patricia, 61 años, aceptó hablar de lo que ha vivido.

El único parámetro común a cada víctima: ser víctima de violencia por ser mujer.
En 2020, el género todavía marca los peligros a los que seremos sumisos en nuestra vida. La igualdad de oportunidades está lejos.

A las armas ciudadanas (bueno, para las que tengan el lujo de poder ser reconocidas como ciudadanas en su país): nos toca luchar para obtener, por fin, una igualdad plena. Nos toca luchar para que, por todo el mundo, ser una mujer no sea un factor de riesgo para nuestras vidas.
Pero a sus violencias, respondamos con la educación.
A su fuerza, impongamos nuestra solidaridad.
Una guerra pacífica contra daños físicos para ofrecer por fin, a las futuras generaciones, un mundo donde el sexismo no hará víctimas suplementarias, hasta en los países más poderosos como en Francia donde también hay violencia de género y violencia doméstica . 

Te propongo entonces aprender un poco más sobre las violencias en el mundo. Cifras oficiales pero también buenos ejemplos a seguir para preparar nuestras armas contra un enemigo común: la injusticia social. 

1. Las cifras de violencia de género y violencia doméstica en el mundo

                                                                                                                                 

La relación de fuerza entre un hombre sobre una mujer es tan marcada que las mujeres son víctimas de sus propias familias, de su propio entorno, víctimas de violencia de género y violencia doméstica. El lugar donde deberían sentirse en seguridad, su hogar se transforma en un peligro. 

No solo las mujeres están en peligro es su casa, sino que 1 mujer de cada 2 en el mundo no tiene la libertad de su cuerpo cuyas elecciones pertenecen a su pareja por lo visto… Y otras, simplemente no tienen acceso al placer. 

Las mujeres todavía son consideradas como objetos de mercancía en el mundo - objetos sexuales con un valor comercial negociable. Su cuerpo no les pertenece, y además tiene precio. 

Estas últimas cifras resumen en fin y al cabo todo lo que podemos encontrar sobre el tema.

Ser una mujer en 2020, no solo es vivir una recidiva del sexismo marcado como lo podemos ver en el mundo con la moda del “entre chicas”.

También es vivir peligros reales por el mundo. La violencia de género y violencia doméstica son peligros de muerte y sexuales.

2. ¿Por qué? ¡Partriar que!

¿Por qué seguir soportando tales peligros en el siglo XX?
¿Por qué las mujeres son víctimas de sufrimiento?
¿Por qué el género femenino vive la violencia de género y violencia doméstica ?

Me pregunto lo mismo. Además, sabemos que las mujeres hacen el 66% del trabajo mundial y producen el 50% de la comida (Mujeres y hombres, Frédérique Bedos).

Las mujeres son fundamentales, obviamente más allá del aspecto reproductivo. Contribuyen al desarrollo económico, siendo a su vez pagadas menos que sus compañeros masculinos: en promedio, en el mundo, un 40% menos.

Sin hablar de la carga mental que viven a diario.

Sumisas a la violencia de género y violencia doméstica, mano de obra fácil… todo esto por culpa de un sistema que funciona así desde siempre. El patriarcado. 
El patriarcado, ¿qué es? 
Primero, no es un mito o una leyenda fantástica. 
Es una organización social donde un hombre detiene un poder superior, en política, economía, religión… Una autoridad superior a la de la mujer. 
Es la definición del diccionario. 
En general, indica la construcción social que ha favorecido a los hombres a lo largo de la historia a costa de los derechos de las mujeres. 

Un pequeño ejercicio ahora. 
¿Quiénes son los autores más conocidos? 
¿Quiénes son los grandes héroes de la historia? 
¿Quiénes son los artistas más conocidos de los últimos siglos? 
¿Quién manda en las iglesias, las mezquitas, las sinagogas, los templos? 
¿Quién constituye la mayoría de los intervinientes en los parlamentos nacionales? 
Me extrañaría que hubieras respondido Virginia Woolf, Jeanne d’Arc, Frida Kahlo, Santa Maria madre de Dios y de las mujeres… Por cierto, nunca te has preguntado ¿por qué en una baraja, el rey gana contra la reina? 

Lo que te quiero hacer entender es que hay una omnipresencia masculina en nuestras historias, sociedades, culturas. 

Los hombres siempre han tenido un poder superior al de las mujeres, un rol más importante determinado por un desarrollo patriarcal en su favo; 

Un desarrollo al que ellos mismos han participado precisamente para asentar su autoridad.

Nos quedamos con países donde: 

Ya está, ¿ves el vínculo entre patriarcado y violencia de género y violencia doméstica en el mundo?

En un mundo donde la superioridad masculina sigue siendo dominante en muchos países (e insisto, también en las zonas ricas), no hay nada sorprendente en cuanto al hecho de que  la condición de la mujer sea tan lamentable.

Mientras que algunos hombres continúen de creer y de alimentar una superioridad, mientras que otros no hayan entendido todos los privilegios de los que benefician en comparación con las mujeres, no podemos esperar la igualdad que merecemos.

3. ¿Pero qué podemos hacer?

La primera cosa que hacer, es cuestionarse. 
Empiezas bien! 
El hecho de ignorar el problema llega a aceptar este sistema. Mientras que pensar en pistas para cambiar las cosas, es un primer paso. 

Hablar, debatir, intercambiar. Es un segundo paso hacia el cambio: explicar la situación a otros, y lanzar pistas de reflexión. Comunicar estas cifras, buscar otras, compartirlas y poco a poco, despertar al mundo sobre la violencia de género y violencia doméstica. 
Siempre se dice que el mundo es más pequeño de lo que pensamos: podríamos dar la vuelta rápidamente si cada una pone de lo suyo. 

Es aún más fácil con las redes sociales, de las cuales no hay que subestimar la importancia y el peso. Son las armas modernas: con un gesto, podemos alcanzar a cientos de personas, hasta miles que puedan hacer lo mismo. 
Un proceso muchas veces viral, pero en el buen sentido…y además, prefiero una pandemia de toma de conciencia sobre la violencia de género en el mundo que una pandemia de coronavirus. 

También nos podemos asociar a colectivos que proponen acciones concretas: manifestaciones, peticiones, huelgas, collages de eslóganes fuertes… Su objetivo es hacer ruido, volverse visibles para que todo el mundo lo vea. 
Lo importante es que hablemos de las violencias de género, que las subrayemos, que las metamos en evidencia para que todo el mundo pueda reaccionar a su nivel. 

Porque hablar de un tema y rebelarse funciona. 

Te propongo un pequeño top 3 de las diferentes leyes que han sido votadas en el mundo después de la presión metida por ciertas asociaciones feministas para mejorar las situaciones vividas por las mujeres de violencia de género y violencia doméstica.  
Un poco de positividad para inspirarse de lo mejor. 

ONU Mujeres ha apoyado actividades que han permitido en ambos países la inscripción de “feminicidios” como una infracción penal específica, en una zona del mundo  donde el nivel de feminicidios es bastante alto. Procedimientos han sido desarrollados para sancionar este crimen como tal, pero también para evitar las futuras violencias físicas. Es un reconocimiento legal del feminicidio, es decir del asisenato de una mujer por su género… Palabra que todavía no aparece en el Código penal francés por ejemplo. 

Una mujer víctima de violencia de género y violencia doméstica puede encontrar una asistencia psicológica y jurídica gratuita en España. Puede pedir un juicio rápido ante un tribunal especializado en violencia de género. El juicio puede organizarse en sólo 15 días. También se han introducido órdenes de protección para proteger a las mujeres e impedir que los acusados se acerquen a ellas. En 2018 se hicieron 20.000 pedidos, frente a los 1.300 en Francia.... De hecho, 47 mujeres fueron asesinadas por sus parejas en España en 2018, frente a 120 en Francia. 

La definición de la violacion ha sido modificada, pasando de “un acto sexual bajo amenaza o violencia” a un acto sexual con una persona que no ha participado “libremente” en ello. El consentimiento debe ser expresado por una palabra o por gestos, y los futuros juicios se basarán en estos aspectos. Es un cambio de ley fundamental, cuando sabemos que las violaciones no siempre pasan bajo amenaza o violencia… Además, la ley estipula que la policía debe informar a la víctima inmediatamente que dispone del derecho a asistencia jurídica gratuita para guiarla durante su denuncia.

Ves, la violencia de género y violencia doméstica acaban por ser condenada.

Espero que esta vuelta al mundo te haya abierto los ojos sobre las realidades de las que somos víctimas.
Los derechos de los hombres tienen un nombre apropiado: fueron hechos por, para y a favor de  los hombres.

Nos toca a nosotras, las mujeres, poner remedio para que también podamos contar con estos derechos fundamentales para nuestra vida.

Quién sabe, tal vez un día deje de ser peligroso para una mujer volver a casa.

SisterHome también ofrece pases gratuitos a las mujeres víctimas de la violencia para ayudarlas a emanciparse a través de sus viajes. Se trata de una iniciativa inspiradora para que todas las mujeres puedan reconstruir sus vidas a través de encuentros. Puedes formar parte de esta ayuda mutua acogiendo a las mujeres que viajan solas, ofreciéndoles un paso cálido en su reconstrucción.

Y sí, la aventurera de mañana es una mujer independiente y libre.

Sueño con un mundo en el que el género no define el estatus social. Un mundo por el que podamos pasear sin encontrarnos con desigualdades tan violentas.
Un mundo ideal en el que hombres y mujeres no se oponen, sino que están en plena paridad.

Eso es el feminismo.
Indignarse ante todas estas cifras sobre la violencia de género y violencia doméstica para mejorar la situación, estemos donde estemos, como sea.
Tender la mano a las víctimas para ayudarlas a levantarse, remangarse y decir "ya está bien".
Estar ahí para su vecina, en una solidaridad internacional que hace frente a toda esta violencia.

Y tú, ¿también eres feminista?

Traducido del francés por Inès El Aoufir